En la noche de ayer, la Junta Gestora de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Resucitado y María Santísima de Luna determinó la difícil decisión de que el paso de las Tres Marías dejase de procesionar el Domingo de Resurrección. Tras la respectiva decisión de la Junta Gestora, se comunicó el resultado al equipo de capataces y costaleros que comanda D. Jesús Cabrera Rojas. El misterio representaba las imágenes de María Salomé, María Cleofás y María Magdalena cuando salieron al encuentro de la Sagrada Resurrección de Cristo.
Los motivos de la decisión fueron dos, uno económico principalmente, debido que se está pretendiendo una reducción de gasto necesaria para el sostenimiento de la Hermandad y otro organizativo, en base al desfile procesional de cada Domingo de Resurrección. Desde la Hermandad del Domingo de Resurrección nos comunican que no ha sido una decisión nada fácil, y que siempre se ha buscado en beneficio de lo que la Hermandad necesita y necesitará.
Estas decisiones nunca son fáciles en el seno de una Hermandad, debido a los sentimientos que conlleva, aunque siempre hay que tener en cuenta que todo lo que se hace o se realiza desde una Junta, siempre se hace buscando el bien del colectivo en total, aunque a veces conlleve un momento algo delicado. Nuestra localidad ha tenido en diversos momentos algunos episodios de tal calado, como el que ocurrió en la Semana Santa de 2006, año en el que la Cofradía de Nuestro Padre Jesús del Silencio y María Santísima de la Salud decidió que por falta de hermanos costaleros, el paso de María Santísima de la Salud saliese a ruedas.